Este
párrafo de Cortina, publicado en el blog de la asignatura ha sido el que me ha
conducido a hablar en esta entrada sobre el respeto, podeis encontarlo en el
siguiente enlace: http://edmov.blogspot.com.es/2011/12/moral-kantiana.html
Se define respeto como la
consideración, atención o deferencia que se debe a una persona. Puede ser
también lo que nos lleva a reconocer los derechos y las dignidades de los
otros.
El respeto se fundamenta en la
dignidad de la persona. Dignidad de igualdad con todos, debemos tener respeto a
nosotros mismos y a los demás. Es importante no confundir el respeto con las
normas de convivencia respetuosas, el respeto da un paso más, va mas allá de
las formas, es la primera condición para poder tener una convivencia con los
demás.
Tras
leer el párrafo de Cortina, se me vino una pregunta a la cabeza, ¿Dónde me
inculcaron a mí la idea de respeto?, y la primera palabra que se me vino a la
cabeza fue “Taekwondo”. Al igual que vosotros supongo que desde que somos
pequeños en nuestro ámbito familiar se nos enseña lo importante que es el
respeto, pero a mí en el lugar en el que más se ha hecho hincapié sobre este
principio ético fue en el gimnasio en el que entrenaba. Después 12 años todavía
me acuerdo cuando el primer día que entre al gimnasio mi maestro me dijo
“Sheila lo más importante aquí es el respeto, el respeto hacia a mí y el
respeto hacia tus compañeros”, esa misma frase la repetía a cada uno de los que
entrabamos por aquella puerta, y a mí nunca se me ha olvidado. El Taekwondo ha
sido un deporte muy importante para mí, y desde mi comienzo lo he visto ligado
a la palabra respeto y a la palabra obediencia. Quizás por esto aunque es un
deporte de lucha, he sabido convivir con mis compañeros y con mis contrincantes
en el tapiz, he aprendido que debía respetar las decisiones arbitrales, que
debía respetar a los oponentes, en definitiva he aprendido que debía tratarlos
a todos como me gustaría que ellos me trataran a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario